Un edificio "build to rent" de 37 viviendas, situado dentro de un tejido urbano en constante transformación de zona industrial a residencial, con recursos económicos limitados. La propuesta busca una solución que aproveche las condiciones del lugar en relación con el soleamiento y el confort de sus ocupantes, a la vez que sea racional y económica, de fácil mantenimiento y flexible a futuras adaptaciones.
El edificio consta de sótano, planta baja y cinco pisos, escalonados en la parte superior para crear terrazas con orientaciones adecuadas en los áticos, a fin de aprovechar las terrazas superiores como parte privilegiada de las viviendas. Los apartamentos son en su mayoría transversales, lo que permite la ventilación entre fachadas opuestas. Las zonas de día se benefician de la orientación suroeste potenciada por generosas terrazas como proyección de los salones, que se orientan hacia el pequeño parque público del patio interior. La estrategia de centralizar las instalaciones mejora las tareas de mantenimiento y optimiza su eficiencia.
La fachada sigue una solución constructiva duradera, eficiente y de bajo mantenimiento, al tiempo que utiliza un material reconocible en los edificios industriales del entorno. La mampostería es el elemento principal, con el que se crean relieves, texturas, aparejos y celosías, introduciendo el color como sencilla estrategia para hacer más amable el conjunto del edificio. La fachada que da a la calle, con menos luz solar y donde la mayoría de las estancias son dormitorios, tiene un ritmo de huecos repetitivos protegidos por persianas exteriores, que permiten controlar la privacidad y el sombreado interior, mientras que la fachada suroeste es permeable, con grandes balcones para las habitaciones y toldos retráctiles de protección solar que se regulan tanto separada como centralmente.
